En estos días, lo que parecía ser una muestra de poder por parte del partido oficial, con lo que muchos veíamos como una especie de “elecciones primarias” en tanto que MORENA elegiría entre un menú de seis aspirantes al candidato oficial de dicho partido y enfrentar la contienda legal por la presidencia, casi segura de ganar, dadas las preferencias del electorado; surge la manzana de la discordia y todo cambió.
Aunque los precandidatos de la oposición ya habían anticipado su participación, la semana pasada vimos un fenómeno con Xóchitl Gálvez, una verdadera sorpresa, incluso, para ella misma. Permítame analizar la situación.
Los antecedentes o por que ganó López
La elección de 2018 no la ganó López Obrador solamente por insistencia, sino por una combinación de hechos y una estrategia contundente; los hechos fueron la salida masiva de políticos experimentados que se llevaron todas sus prácticas (buenas o malas) y su “cartera de clientes” de muchos años, hablo de todos los que abandonaron sus partidos y se fueron a MORENA.
Segundo hecho, los excesos cometidos por todos los partidos, sus gobiernos y sus gobernantes; los excesos de los partidos se resumen en exprimir a sus audiencias mediante acarreos, promesas no cumplidas a cambio de votos y un sinfín de atropellos y casos sin atender; los hechos por parte de los gobiernos fueron algo parecido, pero sobre todo la enorme soledad en la que han dejado a la ciudadanía en temas sobre todo de inseguridad administrativa y de impartición de justica, la falta de atención a necesidades mínimas de la sociedad y de la gente más pobre, dejan un creciente mal sabor de boca que tarde o temprano con la llegada de un avatar, sería recordado en las urnas.
Tercer hecho, los gobernantes; basta decir que de la foto, en la que sale el entonces presidente Peña Nieto, rodeado de los gobernadores en funciones en aquel momento; el 70% de ellos hoy están o perseguidos o tras las rejas o bajo investigación por delitos de fraude, mal versación de fondos y/o vínculos con la delincuencia organizada. Los excesos de poder han sido escandalosamente consistentes -ya sé lo que está pensando: esto no es nuevo. Aunque estos excesos los sigue cometiendo buena parte de los gobernantes en funciones en el presente.
El Sr. López Obrador, ganó porque supo conectar con esas audiencias resentidas, desatendidas y golpeadas, además de que muchos grupos sin representación política, sino con sus propios intereses; buscaron cobijarse ante la pérdida de credibilidad y fuerza de los partidos tradicionales; en este punto no llamo grupos de poder con interés creados a empresarios o políticos, además de éstos estaban los líderes de los mercados, de las colonias, grupos ilegales que toman calles para vender sus mercancías (algunas ilegales o producto del robo) y que poco a poco se fueron mezclando con grupos delincuenciales, una especie de blanqueo de la ilegalidad y la delincuencia, a través el proceso electoral y el cobijo de un partido legal.
El entonces candidato de MORENA -y fundador del mismo partido- conectó en un discurso hacia esos grupos lacerados y olvidados por años, con la promesa de alcanzarles un pedazo del pastel que han visto por décadas y del que nunca han gozado y se hizo la contundencia de un triunfo aplastante.
Otro hecho es que la clase media y alta en México, tuvieron comportamientos una mediocre y la otra tradicional, lo cual acabó de solidificar el triunfo de López Obrador, que no MORENA, en las urnas. La clase media no salió masivamente a votar, sólo el 53% de los 56.6 millones de votos emitidos; esto es, fueron a votar masivamente las audiencias descritas arriba y la clase media se quedó en casa, su comportamiento fue mediocre y la clase alta que se sentía identificada y confió en que el rumbo natural de las cosas le daría el triunfo a José Antonio Meade, es decir, fue tradicional.
Los hechos hoy
En Política podemos ser todo, menos ingenuos; esta es una actitud inútil para entender lo que sucede a nuestro alrededor y poder comprenderlo. Menciono esto porque los precandidatos de la oposición que se han ido “bajando” del proceso, lo van haciendo porque se van enfrentando a la realidad, pedirles 150 mil firmas dispersadas en el país de manera equilibrada es una locura para un académico y teórico de la OCDE como José Ángel Gurría o para una mujer inteligente, formada y educada, pero lejana a la gente como Claudia Ruiz Massieu o para Juan Carlos Romero Hicks al que no creo que conozcan en Chiapas o Campeche y seguramente él también lo ve así.
No dudo que el Sr. Lamadrid sea carismático, inteligente y bien intencionado, ha dicho que está orgulloso de ser priísta y que bueno que lo diga abiertamente, es respetable; pero primero, como él mismo dijo, él conoce a un PRI que no es lo que todos los demás conocemos o recordamos; y segundo, su apellido le pesa; aún cuando sabemos su eficacia al frente de la Secretaría de Turismo; y tercero y más importante, no conecta con la gente que engrosa los votos duros y masivos y que es donde hay que concentrarse.
Prácticamente es el mismo caso de Santiago Creel, no hay lugar para los políticos correctos, elegantes, aristócratas y cuyas formas de hablar no conectan con los electores, que se han acostumbrado a discursos viscerales y arrebatados del presidente aunque en más de las veces sea manipulación barata y una retahíla de mentiras.
Ser ingenuo no es útil.
¿Qué se requiere para la contienda?: Una manzana de la discordia.
Para desarrollar la campaña de oposición y al menos bajarle votos a la candidata oficial se requieren principalmente tres cosas: Alguien que sea intachable, que conecte con la gente y que esa gente se pueda identificar, me explico:
Alguien intachable, significa que no tenga pasado que le pueda ensuciar sus pretensiones y de la mano con esto, que haya demostrado capacidad.
Alguien que conecte, es porque lo que han ignorado los candidatos de todos los partidos es que el electorado eligió no al más inteligente, preparado o con planes y propuestas realistas, sino al más estridente, al que les dijo lo que querían escuchar, al más irreverente; ese discurso es el que conecta con la gente, incluso intelectuales preparados se engancharon con ese mensaje, al mismo tiempo que obreros, campesinos y las nuevas generaciones. Se requiere un discurso así de estridente y así de franco sin menoscabar la inteligencia y la preparación.
Alguien con quien identificarse. Este aspecto es súper importante, por que no se trata de llamar a las clases medias, los intelectuales o los empresarios casi expulsados de los planes del actual gobierno, para una especie de revancha (Por eso Lilly Téllez tampoco era opción); sino se trata de sumar a todos los indecisos, arrepentidos, decepcionados con el actual gobierno y al mismo tiempo encantar a las militancias de todos los partidos tradicionales -incluso a los de MORENA-, no es tarea fácil y tampoco hay un perfil que no sea parcial en este momento dentro de la oposición y del propio partido oficial.
Por todo esto salta a la vista el valioso y particular hecho de que Xóchitl Gálvez vaya tomando tanta fuerza, por sus propios méritos, cumple con lo que a mi juicio se requiere para dar la batalla con la candidata oficial -porque debemos reconocer que la candidata de MORENA será Claudia Sheinbaum- sino que le suma sus habilidades de inteligencia, curiosidad para temas que no comprende y ante los cuales se rodea de gente que sí los domina, es afable y muy hábil para responder bajo presión.
Xóchitl enfrentará la contienda interna de la Coalición, sin duda logrará las firmas, pero hay otros aspectos no escritos en la convocatoria como la aceptación de los propios dirigentes de los partidos (hombres anquilosados y con intereses propios) y el escrutinio de los medios; va a enfrentar los ataques del presidente, como ya lo estamos viendo; el ambiente machista, la falta de sororidad de parte de mujeres del PAN, PRI y sociedad civil, sin olvidar las de MORENA; pero si sale victoriosa y se consolida como la candidata de la oposición, todas estas vicisitudes superadas, serán el mejor propedéutico de lo que le espera en la Presidencia, pues seguramente tendrá un congreso dividido, duro, cuestionador, en su contra en muchas cosas que se deberán corregir de manera urgente, pero de esto hablaremos en otro momento.
Pienso que Xóchitl hoy es la manzana de la discordia porque ha desviado el tema de las discusiones en prácticamente todos los foros, note que hoy ya no hablamos de la mañanera, de las corcholatas y de la economía y/o la violencia, hoy hablamos de ella y como está enfrentando este momento. No vemos muy cómodos ni al presidente ni a la candidata oficial, las otras corcholatas suenan ingenuas, esperemos el curso que siguen las cosas ¿usted qué opina?
Actualización
Al momento de escribir esta nota, me entero del fallecimiento de Porfirio Muñoz Ledo, le recomiendo leer sus obras, sus columnas y opiniones, se fue una gran mente política. Descanse en paz.
Escríbame, me interesa conocer su punto de vista.
Mario Alberto Metacoach
@mhmetacoach
