Un estudio realizado por Greenpeace en colaboración con las universidades de Stellenbosch (Sudáfrica)y Exeter (Reino Unido) ha registrado, por primera vez, “el disparo”, un sonido impulsivo emitido por la ballena jorobada, cuyo significado aún se desconoce.
“Todavía no entendemos completamente lo que significa esta ‘llamada de disparo’ y es fantástico grabarlo en ballenas jorobadas por primera vez”, ha reconocido en un comunicado la doctora Kirsten Thompson, responsable de la investigación como parte de la Universidad de Exeter y del Laboratorio Internacional de Investigación de Greenpeace.
El estudio, cuyos resultados se han publicado este jueves, se llevó a cabo en 2019 en el monte submarino Vema del océano Atlántico, a 1,000 kilómetros de la costa de Sudáfrica, y ha captado “hasta 600 llamadas acústicas de las ballenas” a lo largo de 11 días, siendo las más habituales las emitidas entre madres y crías para comunicarse y dar a conocer sus respectivas posiciones.
El área alrededor del monte submarino Vema está considerada en la actualidad como Ecosistema Marino Vulnerable, pero sufrió una fuerte sobrepesca después de su descubrimiento en 1959, según asegura Greenpeace en un comunicado.
“Nuestro estudio confirma que las ballenas que pasan por Vema, durante su largo viaje a través de los océanos, se están alimentando”, señala Thompson, con lo que “necesitamos con urgencia una protección global de los océanos del mundo para garantizar que estos hábitats puedan persistir”.
Para Pilar Marcos, responsable de la campaña de Océanos de Greenpeace España, este estudio contribuye a disipar la imagen de los ecosistemas de alta mar como “vastos desiertos estériles” y solicita la creación de “una red de santuarios que cubran al menos el 30 por ciento de nuestros océanos”.
Fuente: EFE