La llegada de una centena de empresas a Nuevo León, —entre ellas próximamente Tesla—, es por el trabajo de varios años para atraer inversionistas y la edificación de infraestructura para atender a los capitales extranjeros, afirma Fernando Turner Dávila, exsecretario de Economía de Nuevo León.
“Nuevo León tiene una imagen y un imán, que se debe a su infraestructura, a la gente, a las escuelas de educación superior y técnica, así como a que hay generación de energía y contactos con el exterior”, señala.
El trabajo propició la llegada de 100 empresas a instalar una línea de producción o una fábrica el último año a Nuevo León, ya que “es un estado completo y maduro para las inversiones, así como es el resultado de muchos años y décadas de desarrollo”.
El exgobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez El Bronco “me decía, don Fernando nos podremos ir a dormir usted y yo a China, y como quiera el estado va a jalar”, señala.
A las empresas extranjeras les interesa mucho la proveeduría de Nuevo León, una entidad que tiene un buen soporte, servicio de mantenimiento, ingeniería y software tomados en cuenta por los inversionistas, apunta.
Los inversionistas extranjeros no toman en cuenta los incentivos ni las dádivas para invertir en Nuevo León, comenta el fundador de CEO de Katcon, una empresa con operaciones y plantas en China.
“Probablemente Monterrey es la mejor (capacitada para atraer las inversiones que salen de Asia y China que quieren instalar nuevas líneas de producción en México), quizá le siga Tijuana, Saltillo y Ciudad Juárez para una industria más maquiladora”, dice el empresario regiomontano.
Nuevo León sería el más capacitado para la industria, que busca una mayor integración, más ingeniería, una base de operaciones mexicana para exportaciones globales y dé servicio a otras entidades o a sus matrices, dice.
“Yo creo que Tesla es un ejemplo más, pero hay muchas otras compañías que han encontrado que Nuevo León es un muy buen lugar para invertir”, manifiesta el exsecretario de Economía de Nuevo León.
La relocalización —de empresas de Asia a México— propició que el cerebro de los autos eléctricos, los asientos, los sensores, las cámaras de Tesla fueran fabricados en la zona metropolitana de Monterrey.
Después una docena más de proveedores analizaron traer sus operaciones para fabricar algún producto a la compañía de Elon Musk, quien se sabe tiene conversaciones adelantadas con el gobierno de Samuel García Sepulveda para instalar una planta de los lujosos vehículos en el municipio de Santa Catarina en Nuevo León.
“A México lo posicionaría muy bien tener una armadora como Tesla, que produce coches eléctricos”, declara Manuel Montoya Ortega, presidente en la Red Nacional de Clusters de la Industria Automotriz.
También la instalación de una planta por parte de Tesla en Nuevo León “aceleraría más el proceso de movernos hacia la electrificación, porque la producción (de vehículos) en México es solamente para exportar a Estados Unidos”.
El 22 de octubre de 2022, Elon Musk visitó Nuevo León, a donde se le vio muy cerca de la primera dama del estado, Mariana Rodríguez Cantú, y platicando con el subsecretario de inversión de la Secretaría de Economía del estado, Emmanuel Loo.
El 26 de abril de 2022, el gobernador de Nuevo León, Samuel García Sepúlveda hizo una gira de trabajo por Texas, en Estados Unidos, así como visitó la fábrica de Tesla ubicada en Austin para refrendar un acuerdo que le permite a la armadora de vehículos eléctricos realice la exportación de sus vehículos y productos a través del Puente Colombia.
“Venimos a refrendar este acuerdo, de que todo el ensamble, productos y toda la exportación de carros que se hacen en California y en Texas (de Tesla) van a cruzar por el Puente Colombia”, declaró el mandatario.
Se supo que en el primer trimestre de 2023, el gobierno de Nuevo León hará un anunció de inversión ligado a Tesla, empresa propiedad de Elon Musk.
Actualmente, la economía neolones tiene sus limitaciones, como cualquier otra entidad de la República Mexicana, ya que la tierra relativamente cara, la mano de obra está escaseando, así como su capital es una ciudad grande y el tráfico la complicada, expresa.
“Por otro lado, el inversionista y las empresas buscan ciudades en donde sus ejecutivos puedan estar cómodos, ya que requieren buenas escuelas y afinidades”, detalla Fernando Turner Dávila.
El nearshoring es una oportunidad y como las hubo otras en México y poco a poco vamos mejorando y “la mejora ha sido insuficiente si usted al final mide todo esto que hacemos de inversiones, empresas (nuevas) y tecnologías”, agrega el ex funcionario del gobierno de Jaime Rodríguez Calderón.
Las inversiones y fundaciones de empresas se hacen con el objeto de que la gente viva mejor y el obrero tenga mayores ingresos, se generen mejores empleos y las cosas sean mejores para todas las familias mexicanas, aseguró el empresario. “Ese es el objetivo final de una política pública, económica y desarrollo”.
México ha tenido muchas oportunidades para detonar el crecimiento, que han sido insuficientes: “Hace 40 o 50 años que empezó el tema de las maquiladoras, que algo ayudó y se convirtió en una en una válvula de escape, después viene el TLCAN ayuda, se dio otro paso y fue insuficiente, luego vino la globalización y ahora el nearshoring”.
En todos los casos son buenas oportunidades que nosotros deberíamos hacer más por aprovechar, quizá lo más exitoso de los últimos años fue la atracción de la industria automotriz, concluye.
Fuente: forbes
